Midsommar.

Här i Sverige är 23:e Juni en stor fest.

Midsommar es como la Navidad en Junio. Significa reunirte con la familia en la sommarstuga (summer house) ponerte flores en la cabeza y bailar borracho en torno a un palo floreado aka midsommarstång. Sin embargo, para el inmigrante de a pie, se convierte en uno de los pocos puentes largos del año, en una oportunidad de hacer una escapada corta en la que reunirte con la verdadera familia.

No va por mi mamá, que celebra su cumple hoy, sino por Laura. Igual que nuestra querida invitada del año pasado. Ella es una de esas personas con las que compartí cuatro años de alegrías y tristezas en la front row de Teleco. Una de esas personas a las que entiendo mejor de lo que ella misma podría imaginar. Una de esas personas que ha tenido el valor necesario para asumir su insatisfacción y luchar por cambiar, por duro que sea a veces el enfrentarte a tonterías como una conjuntivitis cuando andas a miles de km de casa.

Tan guapa como siempre, más tranquila que nunca. Con un nuevo amor, uno que está a la altura de lo que merece. Alguien que la apoya, que la trata como la Reina que es - kudos for him! el cuñao nos ha encantao. Con un nuevo trabajo por el que luchar, con un camino que empieza a apuntar en la dirección con la que ella sueña. No sé. Londres es una ciudad genial que visitar, en la que salir de fiesta, pasear o ir de compras. Está llena de posibilidades, nunca te aburrirás allí. Pero, desde mi punto de vista, no es el lugar más fácil en el que vivir. Por mucho que hablen todos inglés. Por mucho que sólo 2h de Ryanair te separen de Zaragoza. Es demasiado sencillo perderse en el anonimato confuso de la gran Metrópoli, es demasiado fácil llorar amargamente sin que nadie se moleste en girar la cara, sin que nadie te intente ayudar.

Ánimo cielo. Adelante. Aunque a veces, haya apoyos que fallen. Sigue luchando por aquello que tu corazón te dicta, por aquello que otros expats podemos entender. Aunque te repitan que no merece la pena, que deberías volver a casa. Sigue levantándote. Sigue caminando.

Sólo espero que pronto sea ella la que pille el vuelo. O que, aún mejor, hagamos expatQuedada en algún sitio. Que la soledad abunda en estos países de habla extranjera y, a fin de cuentas, nadie nos va a entender mejor... Que nosotras mismas.