Mi padre, comiéndose felizmente el postre en EAST, quién iba a decir que le gustaría?
El mismo avión que alejó a mis padres de la ciudad, trajo a Mario&Enri que se encargaron de alegrar nuestra monónotona vida durante una semanita más. Hoy me quejaba, por teléfono de lo mucho que las costumbres extrañas de mis padres (levantarse tarde, comer a la hora de cenar y liarnos el horario) han afectado a mis biorritmos; culpaba al pobre hombre de invitarme a comer a los mejores restaurantes, día tras día.
Vale ya joder. Ni es justo, ni me voy a permitir seguir haciéndolo. Si duermo mal es porque ando inconscientemente trastocada, porque ahora que había conseguido hacer amigos me mueven de oficina y los cafés con Roberth, Lisa y los demás quedarán más lejanos, mucho menos frecuentes, como los guiños en la oficina, las visitas inesperadas de Tomas, los LTEmails y demás pequeñas alegrías que acaecen cuando uno curra en esa hus 5.
Me duele, pues ha costado un año hacer un hueco a la medida de mi creciente trasero en este sofá para que ahora, sin comerlo ni beberlo, me despojen de él. Pero bueno, como diría Dani, no todo puede ser perfecto, así que mejor disfrutar de las cosas buenas que ocurren e intentar olvidarse de lo malo. No es tan sencillo though, por mucho que trates de racionalizarlo, al igual que el cabreo que se ha pillado el pobre Enrique al ver morir a su vieja maquinilla de afeitar esta mañana, no puedes evitar que te afecte. Todos somos personas, con nuestro corazoncito.
Volviendo a lo racional, tras escuchar ese "lo más bonito que he visto en mi vida, es esto" de boca de mi padre, creo que es justo proclamar su estancia en la ciudad como un éxito rotundo. Al llevarlo de paseo por mi vida (o al menos, una versión edulcorada de la misma, pues el sol lució brillante durante 7 días consecutivos) me sentía confusa, recelosa y también contenta, de ser capaz de enseñarle las maravillas que conforman una pequeña parte de mi mundo, ése del que estoy orgullosa de haber descubierto, sola. Así que, supongo que la respuesta a mi querido Calle, es que el viaje fue... Muchísimo mejor de lo esperado.
En ese avión que les llevó de vuelta al calor, venía una pareja muy especial - Mario & Enri, a la que no tenía el placer de conocer pero con la que he descubierto infinitos puntos comunes desde ser estudiosa y responsable hasta la noche o la ropa, pasando por el VIP del CAI y el Senapsill.
A Mario ya lo conocía desde hace un tiempo... Desde que, hace años, fue tan amable de darme esa oportunidad, de creer en mí y de presentarme a aquel que acaba de hipotecarse conmigo. Así que le debo mucho, pues él es, sin duda, lo mejor que me ha pasado. Aparte de agradecimientos, me moría de ganas de enseñarle esa ciudad en la que tanto por apellido (naval) como por aficiones (la música en directo, el bajo, los coches antiguos, los barcos y las cosas con clase, en general) le veía encajando a la perfección.
Si estás con alguien, suele ser porque compartes algo más que una apariencia envidiable con esa persona, así que estaba claro que Enri también disfrutaría de mis propuestas. Ni Stk ni el tiempo meteorológico defraudaron, por segunda semana consecutiva. Noches de fiesta, pasos bajo el sol, cervezas a media tarde - yo vino, ya lo sabes; charlas al caer la noche, confesiones entre mujeres, cenitas buenecicas y momentos inolvidables.
Mucha energía positiva para sobrellevar estos días medio grises de poco que hacer en la oficina y cansancio acumulado por el ajetreo. Por perfecta que parezca nuestra vida, si algo nos falta es hacer una piña grande, de esos amigos de antes, como con vosotros estos días, con los que compartirla.
Siempre nos quedará Fer que es EL UNO tíooo!!!!
Kunsträdgården.
Berns.
2:35:1 - Intentando convencer al Pablo, el dorrman, de que nos admita.
Skinnarviksberget, the prettiest and highest natural viewpoint i Stockholm.
Sunset in my Arcadia, the dreamy Djurgården.
Naughty, hungry boys.
No he tenido fuerzas de bajar a correr, ni a bailar, ni a nada. Pero quiero romper este circulo, pues si no me canso físicamente, no duermo bien. Si no duermo, no descanso. Si no descanso el día es una agobio, tanto en el trabajo como fuera de él, me convierto en este agujero negro de energía negativa que tanto desprecio y no puede ser.
"Si no eres capaz de disfrutar las cosas buenas, eres peor que él."
Las verdades duelen, pero no ofenden. Las verdades duelen, pero en su momento adecuado, son lo único que nos lleva a reaccionar. Así que gracias y no te preocupes, porque esto se acaba mañana en Dancehall.