La uva que vemos desde nuestra ventana, punto álgido de Fatbursparken.
La semana pasada aflojó en stress (por fin) en mi agónica existencia primaveral. Lo que me llevó a plantearme las cosas de otra manera y a empezar a invertir en mi bienestar. Porque si tú no te cuidas, nadie más lo hará.
Así, cada mañana temprano, salía a pasear/correr a intervalos. Tranquilamente, dejando la mente volar. Una buena forma de comenzar el día, que en la oficina terminaba haciéndose más corto de lo normal.
Al volver a casa, veía a los niños del dagis jugar. Con sus chalecos fosforitos, encaramados a la uva, esa que tanto les gusta escalar. Supongo que no somos tan diferentes, pues algo de sol y libertad bastante para llenarnos de felicidad. No sé, pero me gusta ver el parque en todo su esplendor estival. Desgraciadamente hoy, me ha recibido algo menos amable que contemplar. Un apocalipsis de bolsas del system bolaget, borrachos meando en los recovecos de nuesto edificio y gaviotas picoteando los restos que, los hinchas del Hammarby habían dejado en la hierba. Esa misma a la que, mañana temprano, sacarán a los pequeños a pasear.
No lo entenderé jamás. Cómo el alcohol embrutece al personal. Cómo la gente, no encuentra otra diversión que ponerse del revés a la primera oportunidad. Dirán de los sureños, pero do fé de que cafres en el Norte, son bastante fáciles de encontrar.
Ubicación:Fatburstrappan,Stockholm,Suecia
2 comments
Venga, no te pongas de "mala uva". Aprovecha la primavera y el sol.
Guapa!!
Yo ahora tb salgo de caminatas, pero por las tardes ...
Javi sale a correr a las 6 am, pero yo... no tengo aun esa fuerza de voluntad!
Un besito guapa!!
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