Un templo tan extenso y enrevesado como su nombre, en el que perderte entre los topicazos rojoamarillos, faroles y dragones. Pero también sorprenderte con el apego que tienen en China a los echadores de cartas.
Dentro del complejo del templo, hay una serie de pasillos, apilados en dos plantas, donde una chiringuito se sucede al siguiente. Algunos se anuncian a los extranjeros cause they speak english sin entender que muchos de nosotros, preferimos seguir adelante sin spoilers del futuro.
A mi juicio, tener certeza del futuro no te lleva mas que a ser peor en tu día a día. Si crees que tienes el éxito asegurado - ya sea en el trabajo o las relaciones - probablemente vayas a esforzarte menos para alcanzarlo, pues va a llegarte de todas formas, no? Sin embargo, si tu futuro no es tan halagüeño, de nada sirve esforzarte. Hagas lo que hagas, no va a cambiar nada.
Es mejor vivir con esperanza, pero sin certeza. Creer que el futuro está en tu mano y que cada paso, te lleva a alguna parte. Lo importante es caminar con ilusión, tratar de sonreír cada día sin preocuparte demasiado acerca del futuro lejano, que seguramente, terminará por sorprenderte.
Rezos bajo los faroles, en medio de una gran humareda.
El dragón endrogado.
Esta entrada... Me recuerda al restaurante chino de la calle Don Jaime en Zaragoza.
Los cordones no son más que el conjunto de muchos pequeños trocitos, que debes colocar poniendo los dedos como os indico.
Y por el agujero, entramos a la parte del jardín. Donde queda bastante claro que el Feng Shui, es un invento Chino.
Tortugas, nenúfares, puentes, roca, agua corriendo, linternas.
Exacto. Todo en equilibrio.
El estar rodeado por esos bloques de apartamentos que siguen causándome bastante miedo, resalta el contraste entre la China de nuestra imaginación y la realidad en Hong Kong.
…mejor mirar para otro lado y seguir descubriendo el Sur de la isla.
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