Ayer había tanto hielo en la calle, que tras media vuelta a Söder nos volvimos a casa. A limpiar, a hacer todas esas cosas que no da tiempo entre semana. Como mirar fotos, antiguas. Y sentir bastante nostalgia. Dicen que cualquier tiempo pasado fue mejor. Puede que la frase hecha sea cierta. Porque en mí, no hay nada, más que un vacío que se llena levemente tras el paseo diario.
Mi madre es una voz al otro lado del cable, mis hermanas, líneas de texto al otro lado del iPhone. Yo, nada más que pedazos rotos de lo que era. Antes tendríamos menos, pero éramos más felices creo yo. Estudiábamos mucho, pero el encierro tenía su recompensa, porque al acabar exámenes… Llegaría el momento de reunirnos. Pero ahora, en qué se ha convertido mi tiempo libre? Más horas de sueño y de paseo. Hielo, frío. Así de simple, así de vacío. Llevo meses sin arreglarme, sin bailar de verdad. Aunque parezca algo mínimo, a alguien como yo, le mella la moral.
Nunca tengo nada que contar, me paso días sin una sonrisa, en silencio, rodeada de gente que no se digna a abrirse. Sólo me siento vacía, en cuanto pasan unos cuantos días tras la vuelta a casa. Ni el amor más puro del mundo lo llega a compensar. En silencio, todos nos sentimos igual. Es algo, que tu pareja nunca puede ni debe llenar. Ya no me hace ilusión comprarme pingos, si no hay nadie con quien comentarlos. A él, le da igual su cumpleaños, pues no están aquellos que de verdad le hacen sonreír.
A veces me duermo llorando. Porque tengo miedo, de que la vida transcurra y la oportunidad de disfrutar del tiempo con todo aquel que significa algo para mí se pase… Para no volver jamás. Mis primitos crecen a trompicones. A veces temo que se olviden de mí. Pero bueno, supongo que por edad y por lazo, lo que más duele es la situación en la que me pone mi mamá. Ella allí, yo aquí. Mi padre, fastidiando toda oportunidad de escaparnos las dos, en soledad. Nuestros viajes lo compensaban todo, igual que las cortas pero intensas vacaciones en la ciudad, pero ahora que la situación me los arrebata… Lo siento, pero no puedo dejar de sollozar. Por impotencia, por injusticia, por todo lo que no debería ser así, pero no tengo manera de cambiar.
Sí sólo pudiera rebobinar… Pararía el tiempo, dos años atrás.
4 comments
:(
También tienes que ser consciente del enfoque que le das a las cosas, que siempre es negativo.
Entiendo que tengas problemas y que vivir donde vives no es fácil, pero esa ha sido tu decisión.
Has optado por no arreglarte, como tu dijiste una vez, porque son artificios que no puedes mantener, o algo así, cuando antes eras siempre un pincelín.
Por echarte un poco de blush y rimel no vas a dejar de tener el mérito que tienes ni ser la luchadora que eres.
La vida pasa y cambia para todos... yo también echo de menos mi yo de 3 ó 4 años atrás, cuando salía continuamente y siempre tenía la sensación de disfrutar la vida a tope.
Pero nos hacemos mayores, todos, y hay que ver las cosas buenas que este cambio trae!. Tienes trabajo y una pareja que te quiere, que a priori parece lo que muchísima hente anhela.
Por qué no completas el resto de la ecuación con tus ganas, una cena, un poco de eye liner y una sonrisa?.
A veces actualizas con un post positivo, pero al minuto parece habérsete olvidado esa sensación y vuelves a tus quejas de siempre.
Entiendo a la perfección que tienes que estar pasándolo mal por tu enfermedad, pero tienes también un millón de cosas buenas en la vida!. Si tienes tanto miedo del paso del tiempo, no te das cuenta de que si sigues así se te va a consumir la vida entre lamentos?.
Mira las fotos de arriba y abajo.
Ya sólo fisicamente hay una diferencia brutal.
Una persona con criterio estético y capacidad de apreciar la belleza, como tú, se desmotiva al no verse bien fisicamente, pero en serio... mira la diferencia entre las fotos!. La base es la misma, solo que ahora te empeñas en ir 24/7 con esas gafas gigantes y la cara lavada.
Te parecerá una tontería, pero deberías empezar a cuidarte un poco más por fuera, y empezar a dar color a la cara como comienzo de dar color a la vida, que no es más que pequeñas cosas, y esas pequeñas cosas las tienes que aportar tú.
Mira como llevabas antes el pelo, mira como llevabas los ojos, los labios... copia al menos esa parte de ti, que sí puedes recuperar, y acompáñala de una cena el sábado por la noche! ;)
Razón tienes.
Debería ponerle más glitter a mi vida, que es un poco oscura desde que me mudé a esta ciudad. Supongo que el verme peor, el cambio en mi cuerpo no ayuda, pero desde luego, estoy dispuesta a luchar. Ya he perdido algo y vuelvo a entrar en mi ropa. Es cuestión de tiempo - y presión - el volver a la calle.
Ayer fue un día duro, no sé. Supongo que alguien a quien veo todos los días me defraudó. A veces la gente es así, te hacen daño. Piensas que quieren abrirse, pero en el fondo, no es así. Duele. Te sientes solo. Vuelves la vista atrás y da pena. Nada más.
Respecto a arreglarme, Estocolmo no es el sitio ideal para vestir con estilo, constatando eventos como la mañana de ayer:
- Hmm… Estrenaría mi abrigo beige de Seoul
- Ten cuidado, no te resbales en el hielo, porque como se te llene de barro, no hay solución.
- … Ups. Mejor me pongo el cutreplumas.
Cuando no es el frío extremo, es el hielo asesino o la lluvia. El caso, no dejarte tranquilo. En España, estoy con mi gente, en un clima que permite más creatividad y no sé, me siento mejor conmigo misma. Supongo que tienes razón y simplemente, soy hipersensible a la belleza...
Pues si no puedes ponerte un abrigo porque se mancha, echate sobredosis de rímel, el caso es enfocar la vida un poco como antes, que no es incompatible con las responsabilidades ni los cambios que traen...
Entiendo que los planes no ayuden, pero recupera esa coquetería de antes, llueva o nieve.
No te sobra ni un kilo, pero si tu te sientes mejor tan delgada, lucha por conseguirlo... A lo que me refiero es a que dejes de sentirte mal, porque estas igual de bien que antes, solo que con gafas y sin labial...
Pon empeño en ser feliz y no en mirar el lado oscuro de la vida... ;)
Post a Comment