Si el atardecer rosado calienta esta ciudad congelada, las palabras del que se abre, compensan un día que has pasado algo amargada.
Cuando ceno sola en casa, me da mucho tiempo a pensar. En lo que me fascina la manera con que la gente abre sus sentimientos cuando andan protegidos por el anonimato virtual. Igual que cuando viajas solo, las personas se acercan de otra manera a tí. Supongo que escribir cada día acerca de lo que se te pasa por la cabeza, es un también modo de viajar, solo que sentado en tu casa. No cambias de país, sino de entorno humano. Compartes vivencias con cualquiera que esté dispuesto a sentarse dos minutos a analizarlas. Sabes? A mí también me gusta leer lo que escribes, porque no hay nada que inspire tanto como ver las cosas desde otro ángulo. No hay ocasión, en la que no termine aprendiendo algo.
Sé que hay quien se escandaliza acerca de estas cosas, quien lo considera puro exhibicionismo, auto-violación de la intimidad y un peligro, en general. Supongo que es un poco como el querer. Hay muchos que temen sufrir, pero está claro que quien no se arriesgue, nunca ganará.
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Sabes? A mí también me gusta leer lo que escribes, porque no hay nada que inspire tanto como ver las cosas desde otro ángulo. No hay ocasión, en la que no termine aprendiendo algo
TOTALMENTE DE ACUERDO! Llevo un tiempo pasando por aquí gracias a tu manera de plasmar tu dia a dia. Hay frases que has escrito por aquí que son para enmarcar. Saludos!
Los blogs son nuestras ventanitas al mundo, no?
No dejo de sorprenderme cada vez que recibí emails de gente que no conozco de nada, pero que sigue a diario la web. Probablemente, si en vez de enviar un correo tuvieran que llamar por teléfono o en persona no lo harían/haríamos.
E igual que ellos, yo. Cada día al llegar a la oficina, lo primero es dar el paseo por todos los blogs que sigo (ahora mismo estoy en ello). Con un café en la mano, realmente es uno de los mejores momentos del día. Leer las historias de cada uno, ver cómo les va a los demás...
Bueno, por fin viernes, que ya tocaba.
Pues sí, yo sigo tu blog desde hace un montón porque me parece muy sincero todo lo que escribes, mucho más que lo que dice el 80% de la gente de la que me rodeo todos los días...
A veces, el cerrarnos y guardar nuestros sentimientos nos impide ver que hay otra gente que siente o ha sentido lo mismo que nosotros y ha experimentado cosas parecidas. Nos ayuden o no sus consejos, el saber que alguien ha pasado por lo mismo que tú no te hace sentir un bicho raro, y eso es un alivio. Sorprende un montón ver como la gente se abre cuando les cuentas tus problemas, es de las cosas más bonitas que hay.
Me parece genial que escribas así, no cambies!
Yo creo que tu blog es leído por mucha gente, aunque no seas de las que tengan mil comentarios en cada actualización.
Eres tan real, con tanta fuerza pero con tantos miedos... Creo que todas nos sentimos un poco identificadas con alguna de los mil matices que forman tu personalidad.
El anonimato produce ese acercamiento sincero de sentimientos, pero también es el caldo de cultivo de los cobardes y la gente con mala sangre. Cuantas veces la gente se deja llevar para decir la primera burrada que se le pasa por la cabeza y que jamás diría a la cara...
Mucha gente utiliza la red para pagar sus frustraciones y sentirse algo menos mediocre.
Clau, yo no creo que sea una autoviolación de la intimidad. Tú sabes hasta dónde dejar entrar a los demás, eso es lo que verdaderamente puedes controlar de todo esto. También coincido con todos los comentarios anteriores en que tu blog está lleno de fuerza y, sobre todo, de realidad. Podré coincidir contigo en muchas cosas, en otras disiento radicalmente, pero siempre, siempre, ten por seguro que me llevo algo aprendido.
Un abrazo.
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