Not to help those who didn't ask for it.
El sábado recibimos esta propuesta, para unas tarjetas de visita de un estudio de interiorismo en el que colabora alguien cercano. Simplemente, querían algo de feedback sobre el color de las letras - mejor en rosa o en amarillo?
Si hay algo que no soporto en este mundo, son los diseños agobiantes, anticuados, que de alguna manera, me resultan feos. Si hay algo que odio, son los pixelados cutres que salen del paint. Si hay algo que me repugna, todavía más, son las críticas destructivas, que destrozan sin ofrecer alternativa mejor.
Por eso, en lugar de contestar con un It's up to you. But, being honest, they look HIDEOUS to me... me pasé la temprana mañana de un lluvioso domingo trabajando en logos que pudieran irle, tanto al nombre como a la venture.
Cinco propuestas para la identidad que presenté a mi mejor crítico. Una seleccionada que, con su ayuda, convertimos en la siguiente tarjeta de visita, en un email que explicaba a qué viene cada cue, que proponía crear y añadir un email corporativo pero, prescindir de tanta palabrería y colorido.
El resultado? Pues una tarjeta que se quedará en el tintero, por no llamar tanto la atención como el negro funerario con orquídea incluida. Típico de los emprendedores, el no escuchar e intentar imponer su criterio por encima de todo, que al fin y al cabo "el negocio es suyo, right" pero, como me dijo alguien, a lo mejor tienen razón.
A lo mejor la flor funciona mejor en el mercado en el que se mueven, a lo mejor la orquídea hace soñar a las señoras de la pescadería con un hogar más estilosso. Yo, me quedo con mi diseño y lo añado al portfolio de intentos, llenos de buenas intenciones, intentos, que nadie usará en la realidad.
Soñar no cuesta nada y crear, siempre fue un buen bálsamo para mi alma.
PS: Ahora que os sabéis la historia completa... Sois más que libres de comparar y votar :)
6 comments
¿Lo has diseñado tú? Me gusta mucho! :)
Es chulísima.
Bueno, las buenas intenciones a veces se quedan en eso, pero estoy segura de que habrán valorado tu esfuerzo. El negro con la orquídea desde luego a mí no me gusta, me tira más el minimalismo.
Una cosa, y sin acritud para los creadores-creativos: las mayúsculas están obligadas a llevar tilde desde el año 74. Independientemente del diseño, lo que no es, no es.
Ánimo, Claudia.
a mi no me gustan ninguno de los dos-
el primero coincido que es un poco hortera, pero ambos son bste caseros yo no usaria ninguno-
Podría ser la tarjeta de una funeraria... La tuya, más moderna, más sofisticada. No doubt
Creo que la cuestión no es el diseño en sí, si no lo que comunica cada uno sobre la empresa, que es totalmente diferente.
La tarjeta negra me habla de un estilo de interiorismo más clásico, natural, acogedor. Tú diseño me habla de un interiorismo de vanguardia, minimalista, frio.
Hablan de dos empresas totalmente diferentes, si te lo han rechazado es por algo. Lo primero es pensar QUE es tú cliente y que quiere comunicar sobre su empresa. Cualquier otra consideración estética es secundaria.
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